“Laurance Labadie y sus críticos” de Herbert C. Roseman

Eric Fleischmann. Título original: Herbert C. Roseman’s “Laurance Labadie and His Critics” del 1 de abril de 2023. Traducción al español por Camila Figueroa.

Laurance Labadie, el último de los anarquistas individualistas, heredero de Warren, Spooner y Tucker, ha sido señalado en los últimos meses de verdadero fósil por un joven Wobbly (que considera que el anarquismo individualista es irremediablemente burgués), caracterizado por un discípulo de Ludwig Von Mises como “incapaz de pensar razonadamente”, denunciado como “cretino” por otro joven discípulo de la economía “Austriaca”, y atacado por ser supuestamente “doctrinario” por un discípulo de Gandhi.

El hecho de que estos ataques hayan sido perversos, por un lado, y descuidados e increíblemente ingenuos, por otro, es una medida de la decadencia general del radicalismo libertario nativo de Estados Unidos en los últimos veinte o treinta años. El Sr. Labadie es el primero en admitir que es un “viejo cascarrabias”, ¡pero le encantaría ver a sus vilipendiadores salir con algo de ese buen “pensamiento razonado”! Parece que hoy en día está terriblemente pasado de moda pronunciarse a favor de un programa justo y equitativo para la tierra y el dinero. A los críticos socialistas (y gandhianos) de Labadie les gustaría acabar por completo con esa cosa horrible (el dinero); los Von Misianos y los objetivistas quieren aferrarse a todo ese interés de “preferencia temporal”. ¿Nuestro sistema económico actual causa la guerra? ¡Dios no lo quiera!

Este escritor no tiene dudas de que el trabajo del Sr. Labadie sobrevivirá a sus críticos. Escondido en oscuras revistas, grandes resmas de material virtualmente sin leer y sin publicar están haciendo una montaña de un libro demoliendo a todos los que se acercan ya sean socialistas, comunistas, falsos emprendedores libres y todos los otros faquires que dicen hablar por la “humanidad”.

Durante más de cuarenta años, Labadie se ha enfrentado a socialistas, anarquistas comunistas, monotributistas, equitistas, gueselistas y socialcreedores, y siempre ha salido vencedor. Sin embargo, hay que señalar que rara vez ha recibido las gracias por sus esfuerzos. De hecho, normalmente ha sido escupido y tachado de aguafiestas y chiflado.

Aunque imagina un mundo de libertad económica, Laurance Labadie no es un creador de sistemas. Él cree que la verdadera libertad de competencia mostrará pronto lo que es. Tampoco es un utópico, pues considera que la verdadera libertad es un meta más que un lugar.

Hijo de Jo Labadie, de la famosa Colección Labadie, Laurance Labadie ha superado con creces a su padre como pensador y polemista. Laurance Labadie ha tenido la suerte de estar en contacto la mayor parte de su vida con lo mejor que se ha escrito en la tradición liberal-radical, una tradición que se ha extinguido como el dodo, una tradición que ahora plagian los portavoces del statu quo que se proclaman libertarios, pero cuyo concepto de libertad es en realidad la libertad por permiso que les permite aferrarse a sus ganancias mal habidas.

Labadie es un profeta aunque no un Mesías y el pronóstico para los profetas en cualquier tiempo o lugar tiene que ser muy bueno. Sin embargo, si alguna vez sobrevivimos a este mundo orwelliano, creo que las ideas de los “cranks” darán sus frutos.

Comentario- Eric Fleischmann

​Este artículo no fue escrito por Labadie, sino por Herbert C. Roseman, editor de Revisionist Press y de A Way Out, de la Escuela de la Vida, y apareció por primera vez en el Vol. 23, Nº 3 y 4 de esta última en 1967. He decidido incluirlo en el Proyecto de Archivos Laurance Labadie, en primer lugar, porque obviamente está relacionado con Labadie, pero también porque reivindica las premisas básicas del proyecto. En primer lugar, hay “grandes cantidades de material prácticamente sin leer y sin publicar” escondidos “en oscuras revistas” y que bien podrían dar lugar a “una montaña de libros”. Además, el objetivo de este archivo es, en muchos sentidos, garantizar que la obra de Labadie “sobreviva a sus críticos” (aunque, a veces, yo sea uno de ellos).

Además, es bueno saber que hace medio siglo todavía estaba muy claro para muchos que los libertarios vulgares estaban abusando y difamando las tradiciones de libre mercado genuinamente radicales de pensadores anteriores. Sin embargo, afortunadamente esa tradición no está “tan extinta como el dodo” en absoluto, ya que ha renacido en la era de Internet de la mano de Center for a Stateless Society, Non-Serviam Media, Libertarian Labyrinth, Union of Egoists, Mutualism Co-Op, Alliance of the Libertarian Left, el Instituto Molinari, el Radgeek People’s Daily de Charles Johnson, el Libsoc Caucus del Partido Libertario, libros de libre acceso (como Markets Not Capitalism y Studies In Mutualist Political Economy de Kevin Carson), y más. Desde estos puntos de interconexión, nuevos libertarios anticapitalistas aún más radicales se están soltando por el mundo. Como dice el refrán: estamos en todas partes.

Actualización 4/2/23: No me había dado cuenta de que este artículo ya estaba archivado en el sitio web de la Unión de Egoístas. Hay que darle crédito a quien lo merece.

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